Jugar y Aprender, conceptos unidos.
Hoy en día la mayoría de los juguetes son anunciados como educativos. Parece que con incluir la palabra “didáctico” ya está. Es algo así como cuando vemos en el supermercado un “pan de masa madre”… ¿Realmente lleva masa madre? ¿Realmente son didácticos los juguetes que dicen serlo? Estamos de acuerdo en que gracias a muchos juguetes el niño imagina, crea, planifica y resuelve problemas sobre la marcha. Aprende conceptos y sobre todo, retiene toda esa información sin apenas esfuerzo, además, estos juguetes motivan a los niños y niñas a adquirir o profundizar en cuestiones, habilidades y capacidades que aún no conocen ni dominan. Normalmente, generan momentos prolongados de concentración y contribuyen al desarrollo de sus habilidades físicas, psíquicas, cognitivas, emocionales, sociales y motrices de forma divertida. Por último, contribuyen al desarrollo de la autonomía y la autoconfianza. Sin embargo, para crear este entorno se necesitan dos cosas fundamentales, juguetes...